LINKS| Únicos en su especie

El terrible estigma de Robert Redford| Tiene 76 años y acaba de estrenar en Estados Unidos su novena película como director, The Company You Keep, con Shia LaBeouf, Nick Nolte, Julie Christie y Susan Sarandon. Será el protagonista del nuevo film de J.C. Chandor (Margin Call) y ha confirmado su participación en Captain America: The Winter Soldier. Robert Redford pertenece, como Clint Eastwood, a esa generación de actores que comenzaron en la televisión de los 60 (Maverick, Alfred Hitchcock presenta, Perry Mason…) y, poco a poco, fueron consiguiendo mejores papeles y su salto definitivo al cine. Sin embargo, Redford ha tenido que luchar toda su carrera con un problema añadido: siempre se le ha considerado un tipo muy guapo. Una condición y etiqueta que repateaba al protagonista de Tal como éramos, quien se esforzaba por ser mejor intérprete cada día pero sólo recibía aplausos por su complexión. Según él, hasta Dos hombres y un destino (1969) nadie le consideraba un actor serio. Sea como sea, es obvio que su belleza también debió abrirle muchas puertas y con el tiempo se convirtió, además, en un director de éxito. Aunque su trayectoria como cineasta siempre me ha parecido algo difusa, con títulos redondos como Gente corriente, El río de la vida o Quiz Show: El dilema, y otros irregulares (por no decir terribles) como Leones por corderos o La leyenda de Bagger Vance. En cualquier caso, no hay duda de las enormes contribuciones de Redford al cine, incluido ese frío festival (Sundance) que todos los años reúne lo más prometedor del cine independiente norteamericano.

La revista masculina Esquire le dedica su portada del mes de abril. Unas fotografías de Marc Hom en las que sigue evidenciando todo su atractivo de gran estrella, por más que a él no le gusten este tipo de etiquetas.

 

El arte de cómo despeinarse con glamour delante de una cámara| Hace unos días se difundía el primer trailer de Carrie, nueva adaptación de la novela de Stephen King con Chlöe Grace Moretz y Julianne Moore en los papeles que interpretaron Sissy Spacek y Piper Laurie (respectivamente) en la versión de 1976. Carrie fue la primera novela que se adaptó al cine del escritor Stephen King y se convirtió en todo un éxito, hasta consiguió sendas nominaciones al Oscar para sus protagonistas. Veremos si con esta nueva aproximación, que asemeja idéntica a la primera pero con más efectos especiales, logran idéntica suerte. La protagonista de Game Change ha hablado con el periodista Aaron Gell de T Magazine sobre el reto que supone aproximarse a los personajes que interpreta. Además, no ha tenido inconveniente en someterse a una despeinante sesión de fotos a cargo de Inez van Lamsweerde y Vinoodh Matadin, probablemente inspirada en el desquiciado personaje que interpreta en Carrie.

 

En la página siguiente, un perturbador y elegante Michael Shannon →

 

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